Resumen
En 2018, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución que promueve la armonía con la naturaleza. La resolución también destacó la importancia de garantizar la integridad de todos los ecosistemas y señaló la importancia de la justicia climática. La resolución invita a los Estados a ampliar una red de conocimientos para avanzar en una conceptualización holística y promover la armonía con la naturaleza, ejemplificada por los pueblos indígenas y otros. También reconoce la necesidad de contar con medidas más amplias de desarrollo sostenible que complementen el producto interior bruto. La resolución reconoce «que proteger los ecosistemas y evitar las prácticas nocivas contra los animales, las plantas, los microorganismos y los entornos no vivos contribuye a la coexistencia de la humanidad en armonía con la naturaleza» y reafirma el compromiso con la Agenda 2030 de la ONU, el plan de acción de la ONU para el desarrollo sostenible. La resolución pide a las organizaciones de la ONU que garanticen que nadie se quede atrás y que ningún país se quede atrás en la aplicación de la presente resolución.