Resumen
En 2017, la Fundación Gaia y la Red Africana de Biodiversidad trabajaron con la Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos para crear una resolución que reconozca los lugares sagrados, los territorios y sus sistemas de gobernanza consuetudinarios, como contribución a la protección de los seres humanos. La resolución reconocía que los lugares naturales sagrados suelen albergar una rica biodiversidad que contribuye a la conectividad, la resiliencia y la adaptabilidad de valiosos paisajes y ecosistemas. La resolución afirma que «los Estados Partes, la sociedad civil, las empresas y otras partes interesadas deben reconocer y respetar el valor intrínseco de los lugares y territorios naturales sagrados».