Resumen
En 2018, la Corte Suprema de Justicia de Colombia, siguiendo el ejemplo del caso del río Atrato, declaró a la Amazonía colombiana como «una entidad sujeta a derechos, con derecho a la protección, conservación, mantenimiento y restauración por parte del Estado y las entidades territoriales que la conforman.» A diferencia del caso del río Atrato, la Corte Suprema basó sus argumentos en los efectos que esto podría tener en las futuras generaciones, siendo los demandantes jóvenes ciudadanos de diferentes partes de Colombia. La organización DeJusticia desempeñó un papel importante en el asesoramiento jurídico de este caso.