Resumen
En 2023, la comunidad maya de Homún, Yucatán, México y la organización Kana’an Ts’onot (Guardianes de los Cenotes) -colectivo maya de la comunidad de Homún en Yucatán, México- interpusieron un amparo en la corte federal buscando «la protección y reconocimiento de los cenotes como sujeto de derecho, a fin de proteger, con los más altos estándares, su derecho a un medio ambiente sano, su autodeterminación y la protección de su legado cultural» (1).
Determinar «a los cenotes como sujetos de derechos y a los miembros de la comunidad maya como sus guardianes, situación que implica pasar de una visión meramente antropocéntrica, donde la naturaleza está al servicio del ser humano, a una ecocéntrica, donde el concepto de dignidad reconocido a las personas debe extenderse a los diversos elementos naturales» (2).
El amparo es el resultado de más de un año de solicitudes de la comunidad de Homún para que los gobiernos de México y Yucatán detengan los megaproyectos intensivos de infraestructura a gran escala, inmobiliarios, agropecuarios y extractivos que han causado daños irreversibles al acuífero de la península de Yucatán, y «con ello, la afectación de los derechos fundamentales del pueblo maya y el equilibrio de los territorios que habitan» (1). Estos proyectos -incluido el controvertido «Tren Maya»- se han llevado a cabo sin el consentimiento libre, previo e informado, tal y como se recoge en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de 2007, a favor de la cual votó México. México también es signatario del Convenio sobre Pueblos Indígenas y Tribales (Convenio 169 de la OIT), y enumera en su Constitución la protección de los pueblos indígenas. La demanda explica que estos proyectos «generan impactos socioecológicos negativos sobre el patrimonio bicultural que representa el [Ring of Centoes geological reserve]» y suponen una amenaza para el Anillo de Cenotes, así como para las comunidades mayas que tienen «derechos sobre los recursos naturales de la zona [and] tutela ancestral sobre los cenotes» (2-3).
El tribunal admitió la demanda y concedió una suspensión provisional mientras decide si se convierte en permanente.