Resumen
La dirigente Góngora Farías Fausto, como abogada común de 120 personas, presentó una demanda sobre los incisos primero y segundo del artículo 16 de la Ley Orgánica del Régimen de Soberanía Alimentaria. Los demandantes alegaron que las disposiciones de la LORSA «amparan, camuflan, ocultan e incluso promueven actividades que no sólo son ilegales por haber vulnerado expresas disposiciones constitucionales en materia de derechos humanos y derechos de la naturaleza, afectando gravemente y en algunos casos de forma irreversible al medio ambiente, provocadas por la industria camaronera que actúa al margen de la ley…» El tribunal constitucional denegó el recurso, declarando que el texto del artículo 16, incisos primero y segundo de la Ley Orgánica del Régimen de Soberanía Alimentaria no ha sido modificado y no procede realizar un control exhaustivo de la posible inconstitucionalidad alegada, cuestión que ya ha sido resuelta por el Tribunal Constitucional.