Resumen
En 2012, Ferguson, Pensilvania, adoptó una declaración de derechos de la comunidad que prohíbe la extracción de gas natural. La ordenanza reconoce el derecho de los residentes al agua pura, al aire limpio, al disfrute pacífico del hogar, a un futuro energético sostenible y al autogobierno. La ordenanza también reconocía los derechos de la naturaleza, asegurando los derechos de las comunidades naturales y los ecosistemas al agua pura, al aire limpio y a existir y florecer en el municipio. Las empresas que violan la prohibición de la extracción de gas natural no tienen los derechos de las «personas» que otorgan las Constituciones de Estados Unidos y de Pensilvania.