Resumen
En 2017, la Ciudad de México adoptó el lenguaje de los Derechos de la Naturaleza en su nueva Constitución. La Constitución exige que «se expedirá una ley secundaria que reconozca y regule la protección más amplia de los derechos de la naturaleza conformada por todos sus ecosistemas y especies como ente colectivo sujeto de derechos.» La Constitución también prevé el reconocimiento de las relaciones ontológicas de las comunidades con respecto a la naturaleza.