Resumen
En 2012, Easton (Nuevo Hampshire) votó para adoptar una ordenanza basada en los derechos de la comunidad que garantiza el derecho de la ciudad a un futuro energético sostenible y prohíbe la adquisición de terrenos para la construcción o el funcionamiento de proyectos energéticos no sostenibles dentro de la ciudad. La ordenanza también reconocía los derechos de la naturaleza. La ciudad de Plymouth colaboró con el CELDF durante varios años para adoptar esta ordenanza y detener la construcción del Northern Pass, una línea de transición eléctrica de gran altura que suministra energía hidroeléctrica desde Canadá.