Resumen
En 2021, la ONG En Commun 66 de Francia redactó una Declaración de los Derechos del Río Tet. La declaración destacaba la importancia del río en el cumplimiento de las funciones ecológicas esenciales y reconocía la dependencia de los seres humanos de los ríos. Advirtiendo de los efectos del cambio climático y de la contaminación, la declaración insiste en la necesidad de reconocer la naturaleza como bien común y sujeto de derecho. Declara que «el río Tet es una entidad viva e indivisible desde su nacimiento hasta su desembocadura, delimitada por su cuenca hidrográfica, y tiene personalidad jurídica». Sus derechos incluyen el derecho a existir para vivir y fluir; a realizar sus funciones ecológicas esenciales; a no ser contaminado; a abastecer y ser abastecido por los acuíferos de forma sostenible; a mantener su biodiversidad; a la regeneración y restauración natural; y a demandar. Aunque todavía no se han nombrado tutores específicos, la declaración dice que incluirán representantes de los firmantes y de las comunidades.